De todas las estaciones del año, el verano es la que muchos peruanos esperan con ansias. Las altas temperaturas y los días llenos de sol dan pie a pasar momentos agradables en la playa o el campo. Sin embargo, con la llegada de esta temporada también hay que tener ciertos cuidados, sobre todo con los menores de edad.
De acuerdo con el Ministerio de Salud, las enfermedades comunes en los niños a nivel ocular como la conjuntivitis o el ojo seco son comunes durante estos meses, debido a la radiación ultravioleta por exposición directa a la luz solar. Esto afecta mucho más a los pequeños de la casa, quienes son los que más se divierten fuera de casa, sea en una piscina, jugando en el parque o en cualquier espacio al aire libre.
Para disfrutar de un verano saludable, conoce cómo cuidar la salud ocular de tus hijos. Sigue los consejos de diferentes especialistas y cambia esos amargos momentos por buenos recuerdos familiares.
- Uso de lentes adecuados
Según Alfons Bielsa, presidente del Colegio Oficial de Ópticos y Optometristas de Cataluña, los ojos de los más pequeños son 20 veces más sensibles que la piel ante el sol. Los rayos ultravioletas son causas de posibles cataratas y degeneración macular.
Por eso, se hace necesario que los menores utilicen lentes con protección solar. En el Perú, los niveles de radiación solar son altos y, en algunos casos, extremos. Se sugiere adquirir las gafas en lugares especializados y de confianza.
- Cuidados de la vista en la piscina
Como parte de la temporada, muchos niños disfrutan del verano en una piscina, ya sea por diversión o porque están inscritos en un curso de vacaciones útiles. Sin embargo, en estos lugares el cloro y algunas bacterias pueden causar algunos efectos adversos.
Para evitar esas situaciones, es importante que el pequeño nade con lentes para proteger sus ojos. Además, se debe verificar el estado de la piscena para saber si está apta para el uso público.
- Evitar exposición a pantallas
Actualmente, los niños y niñas encuentran diversión en múltiples videojuegos. En los meses de verano, donde no hay responsabilidad escolar alguna, podrían excederse en el uso de pantallas y/o cualquier aparato electrónico.
La Organización Mundial de la Salud recomienda que los menores de un año no deben estar frente a una pantalla. Para los niños de dos a más años, el uso sugerido es de una hora como máximo.
- Buena higiene
Otra de las formas más comunes de afectar la salud ocular es la mala higiene. Es posible que en las manos de los niños habiten bacterias o cualquier sustancia que podría generar infecciones o cualquier tipo de enfermedad visual
Por eso, es importante que los más pequeños de la casa tengan el hábito de lavarse las manos con frecuencia. Este es una norma que debe ser practicada en cualquier época del año.
Las enfermedades oculares están a la orden del día. En el verano, los diagnósticos crecen por causas ambientales propias de la estación. Los niños son el grupo más propenso a sufrir estos males. Por esa razón, es crucial que se adopten diferentes cuidados a la vista para evitar malos ratos y complicar la salud ocular de los más pequeños del hogar.